De tres a cuatro.

Quedamos en que nos ibamos a conocer..
Al final después de tanto conocimiento, hay cierta ignorancia.
La veo al final de cada vaso. De cada trago.

Recurrimos entonces a otro genero, uno más real.
Uno pasional, de amores de mensajes y sonrisas candentes.
Aún así no puedo decirte que hermosa que estas en tus fotos.

Me atrevo a arremeter contra tu corazón.
El es muy frágil pero sabe lo que quiere. Ademas, sabe cuando.
Y mi reloj nunca va a impacientar. Solo busca tu paz.

Y es acá donde pasamos de tres a cuatro en la defensa.
Empiezo a escribir con tinta indeleble, marcando un cierto tono.
Donde las palabras empiezan a fluir con más velocidad.
Donde las palabras empiezan a sangrar con más ferocidad.

No se como empezar a demostrarte la verdad.
Ya no se como demostrarte que quiero ser tu verdad.
Que quiero ser tu presente y no tener que conjugarme.
Pero no puedo explicarme cuanto te quiero en mi vida.

Volvemos entonces a las 3 lineas por prosa.
Pues quizás, las de ganar no esten conmigo.
Y sin embargo, las de amar si lo están. Se rinden a vos, hermosa.

Y en tres simples lineas se dieron a entender que eran todo.
Que eran nada, que eran nadie. Que se necesitaban.
Que querían caminar de la mano en una lluvia bajo cero.

Porque rompemos con todos los esquemas, Milady.
Y porque tengo un ejercito de amor esperando tu señal.
El cual en tres segundos, se desangra en tu mirar.